Juego Heurístico
Descubriendo el mundo
El juego heurístico es una actividad educativa orientada a los niños de entre 12 y 24 meses que proponemos Leonor Goldshimer. Mediante la exploración y la combinación de los objetos, se pretende llegar a una organización del material que responda a las demandas y las posibilidades de cada niño. En este tipo de juego, el niño pone en practica de una manera creativa y divertida el aprendizaje a partir del ensayo-error, sin tener que buscar el buen resultado ni sentir el miedo a fracasar.
A la edad de entre uno y dos años, los niños y niñas necesitan moverse, explorar, descubrir cómo se comportan los materiales cuando se les manipula o cuando se experimenta con ellos ... Pues poco a poco ya deja de pondrá -se cosas en la boca, y empieza a meter y sacarlos de los recipientes, o bien los apila, hace combinaciones ...
Esta actividad permite que los niños investiguen y exploren por iniciativa propia, con las condiciones adecuadas y los materiales adecuados. También es un buen método para que empiecen a trabajar en equipo y, de este modo, poder desarrollar la motricidad gruesa (levantarse, golpear, sortear un obstáculo trasladarse dentro de un espacio ...).
El tipo de material que se utiliza es muy fácil de conseguir. Por ejemplo pueden ser botellas de plástico, rollos de papel de vater, circunferencias ... son objetos que no son directamente didácticos, como un libro o una ficha, sino que se utilizan de forma espontánea y / o reciclada para poder jugar con ellos. Este están distribuidos en una serie de contenedores de diferentes tipos y tamaños, donde el educador les presenta, los ubica en diferentes rincones y se anima a los niños a ir explorando libremente por los diferentes espacios sin interferir en su espontáneo desarrollo.
También se puede hacer en función de la época del año en la que nos encontramos. Si es verano se pueden emplear objetos para jugar como conchas, palitos de helado o tapones de botella; en otoño pueden ser hojas, piedras, castañas ... cuando sea invierno podemos jugar con ramas, trozos de tela, objetos de madera, bobinas de lana ...
Es un juego que gusta mucho a los niños y niñas porque pueden ir experimentando con los diferentes objetos a su ritmo, encontrando cualidades que les sean entretenidas y que luego permitan ser clasificadas de forma similar. Aparte, como es un juego manipulativo, permite descubrir qué pueden hacer con los objetos, y cómo se comportan cuando los niños juegan con ellos: si se caen o no, si caben dentro de un contenedor, como aumenta el peso de un contenedor a medida que se introducen más objetos ...
También se debe tener en cuenta que los mismos contenedores forman parte de este juego, y pueden ser utilizados por los niños con otros fines, como simbolizar un coche, una silla, una pelota ... En este caso, el juego tiene una parte también simbólica.